Hola muchachos, buenos días. Hoy es un día en que nos homenajean nuestros seres queridos. También es un día en que los comerciantes recaudan unas rupias de más, y no creo que esta contingencia del mercado capitalista tenga mayor importancia a la hora de recibir el amor de nuestros pequeñines, y de los no tan pequeñines.
El hecho es que nosotros, los del sexo masculino que hemos concebido niños o niñas, los que están en eso, y los que tienen el atributo para que un nuevo habitante llegue al mundo, somos, y son potencialmente padres.
Sé que no fue un trabajo tan arduo como el de la mamá, pero sí de tanto amor como el de ella.
Estas palabras están dirigidas a todos los hombres que de alguna manera tienen en mente procrear o agenciarse un chiquillo o chiquilla que no tenga cabida en su lugar de origen.
¡Buen día papi!, que la pases bien, tal vez sea solo una fecha, y creo no está de más usar un símbolo como recuerdo de algo agradable, profundo, imborrable, indelegable.
Personalmente creo que la mamá es el alma del niño, y también creo que nosotros marcamos algunos puntos importantes en el camino de la vida de ese pedacito nuestro.
Bueno, tampoco nos vamos a sacar meritos. ¿Quién les regaló su primera pelota, quién les enseñó a jugar a lo bruto?... Sí… y a las nenas también, ¿quién las mimaba como un bobo?
Seguramente no es mucho, pero los queremos desde el fondo de nuestras almas. Parece un poco maricón, pero es así. Con los chicos no existe el sentido del ridículo, podés jugar, decir estupideces, revolcarte en el piso con ellos aunque seas el más macho del barrio, o del pueblo.
No quería hablar de las consecuencias, quería hablar de nosotros, los padres, y de los que en potencia pueden ser.
Pero hablar de nosotros es hablar de ellos/ellas. Entonces, me digo, disfrutemos del cargo que nos dieron ellos/ellas cuando llegaron a nuestras manos sin dar vueltas al asunto.
Para finalizar, qué bueno sería que nos pudiéramos reunir todos. ¿Difícil, no? ¡Los datos que podríamos intercambiar! Igual, hagamos de cuenta que en una mesa interminable nos tomamos y comemos nuestros mejores y más apetecibles manjares en el desayuno de hoy, acompañados de todos a los que queremos y nos quieren. Y a disfrutar…
Como verán, soy un glotón y un sentimental, también lo eran tipos rudos como Humphrey Bogart, y muchos otros.
Final, final…
A veces me gustaría ser como Peter Pan en el País de Nunca Jamás, donde los niños siempre son niños y la vida una ilusión de eternidad.
Buenos días muchachos, que disfruten sentirse padres.
PD: En la Argentina es hoy, en el resto del mundo no sé cuando, el sentimiento es el mismo, sea hoy, mañana, siempre.
Arnaldo Zarza