Relato
Extracto de la conferencia de Sirius García en ocasión del homenaje a Steve Job en la universidad de Palo Alto, Salta, Argentina, Tierra Alfa.
15 de diciembre del 2013
Algo sobre los universos pulsantes.
El hombre, y la materia en general, son manojos de energía que se mueven giran y esconden en los recónditos laberintos de la nada.
El vasto espacio es cuna y refugio de la energía que crea y gobierna mundos y seres.
El espacio es un ente compuesto de pequeños hoyos por donde fluye la energía, un espeso soporte que anida al universo tal como lo conocemos.
Si de alguna manera se pudiera graficar de manera sencilla lo dicho anteriormente, diría que el espacio es algo así como un gigantesco queso gruyere, donde los agujeros contienen la energía, y el queso en sí es la masa madre que los genera.
La energía, o sea toda la materia de nuestros mundos, se encuentran allí vibrando y pasando de un hueco o agujero a otro constantemente.
En esos huecos se crea, transforma, desecha y transporta la materia.
Las partículas se trasladan de un hueco a otro instantáneamente, y lo que llamamos velocidad es el tiempo que las partículas se detienen vibrando en cada hueco.
El planeta Tierra Alfa tiene un hermano gemelo: Tierra.
Este planeta, idéntico al nuestro, ocupa el mismo sitio que Tierra Alfa, y se lo puede encontrar en las mismas coordenadas astrales de esta, siempre y cuando el astrónomo viva en el universo de Tierra. (Risas).
Tierra Alfa, así como Tierra, vibran en sincronía miles de veces por segundo, vale decir que aparecen y desaparecen alternativamente en el mismo espacio sin que uno tenga noticia del otro, dando la sensación de ser cuerpos únicos, sólidos y estables.
El proceso es similar al concepto de una película cinematográfica; “la gente cobra vida como por arte de magia” cuando fotos tomadas con intervalos de un veinticinco avo de segundo cada una dan sensación de continuidad al proyectarse.
Piensen que en los intervalos negros que quedan entre el pasaje de un fotograma a otro bien podrían ubicarse otros fotogramas, otra película... otro mundo.
Se que es difícil imaginar que a cada momento nos evaporamos para que otros, iguales o parecidos a nosotros entren en escena, como tan difícil fue y es comprender el concepto de quién está patas para arriba y quién patas para abajo en las antípodas de Tierra Alfa.
Tierra es un planeta donde la historia de su civilización es casi igual a la nuestra, salvo pequeñas desviaciones de sucesos temporales que se comprobaron en recientes estudios.
La verificación de la existencia de los “Universos pulsantes”, basada en la teoría de López, fue decisiva gracias a la investigación y puesta a punto del Boj II, creación del del señor Steve Job, quién a sus 58 años nos sigue sorprendiendo con su agudeza mental y diseños de avanzada.
Es a él a quién agradecemos y entregamos hoy esta plaqueta conmemorativa.
Aplausos.
Finalmente... Es probable que este mismo acto estén realizando en este momento nuestros gemelos de Tierra.
Gracias Steve.
Arnaldo Zarza